Seguramente está en las puertas del momento más importante de su vida y de su carrera futbolística. Mucho tiempo habrá esperado este instante sin ni siquiera habérselo planteado; sobretodo tan rápido. Pero allí está, dispuesto a dar el salto grande. De Liniers al Mundo, tal como lo hiciera su Vélez. Con su personalidad al mango, esa que lo llevó a tener esta posibilidad única y hermosa. Irrepetible.

 

Vélez Magazine y VélezTv se unieron en la despedida de Nicolás Otamendi previo a su viaje al Mundial de Sudáfrica 2010 donde será el representante de Vélez Sarsfield vistiendo la camiseta Argentina. Una charla única con la gran figura del Fortín donde repasa su carrera en el Fortín, su llegada a la Selección de Maradona y sus sueños de Mundial. Además, habló de su futuro y su posible partida del club.

 

?Fue una lista muy esperada y con mucha ansiedad. Estuve muy prendido a la tele ese día y eso que empezó todo muy temprano y no la daban. Estaba tranquilo. Se dio que estaba en la lista de los treinta y fue algo muy lindo para mí?, anuncia feliz tal cual lo dice su rostro el protagonista de esta nota.

 

-Más allá de la lista, ¿qué significa que Maradona haya dicho con tanto tiempo de antelación que estabas en su defensa titular para el Mundial?

-Se te vienen muchas cosas a la cabeza, como mis comienzos. Uno sueña mucho con todo esto. Afianzarse muy bien en primera, tener continuidad. El sueño de todo jugador es jugar un Mundial y ahora estamos muy cerca. Ojalá que se me pueda dar para toda mi alegría y la de mi familia.

 

Casi como un protagónico cinematográfico es su vida. O por lo menos, el último año y medio. Una suerte de variables se alineó sin permiso para que él tenga su oportunidad en el fútbol grande de la Argentina. Sólo contaba con un puñado de minutos en el 2008 en su haber. Sin embargo, Ricardo Gareca le confió esa posibilidad; y mucho mejor, lo bancó allí. Cuadro a cuadro van pasando esos primeros seis meses hasta verlo trepado a lo más alto de una multitud que celebra la conquista del Clausura 2009, vestido de campeón con el traje inconfundible de un festejo de campeón con el torso desnudo y en ropa interior. Llegaría el tiempo de los elogios, el reconocimiento y la Selección. Con Diego Armando Maradona a la cabeza, este talentoso defensor se vio vestido de celeste y blanco alimentando un sueño fantástico. Por eso el agradecimiento a la institución que le dio la chance de mostrarse y ser el gran jugador que es hoy. ?Hacer toda una carrera acá en Vélez, ya que desde los siete años que estoy y nunca salí del club no es poca cosa. Como institución Vélez es una de las mejores y estoy disfrutando mucho esto. El haber pasado por cada una de las divisiones inferiores, siempre aprendiendo algo nuevo. Estoy muy agradecido al club por brindarme cada cosa que me dio. Estoy disfrutando al máximo y tirando toda la mochila a la cancha?, remarca con un frase digna de su personalidad.

 

-El 2009 seguramente ha dejado una gran huella en tu carrera?

-Sí, fue un año muy soñado porque al inicio de la pretemporada yo era el sexto central. Después por las cosas del fútbol, se me dio la posibilidad de tener una continuidad en primera que es muy importante. En ese momento estaba Waldo Ponce, un jugador de selección, que era muy complicado sobrepasarlo a él. Con la oportunidad que me dio Ricardo (Gareca), eso me hizo muy fuerte y por el nivel de juego que mostré en el campo de juego lo llevó a decidir en mantenerme esa continuidad en primera. Eso me dio fuerzas en un 2009 con una seguidilla de partidos importantes. Que se me de en mi primer semestre en Vélez, mi primer campeonato, es muy importante para mí. Ahora quiero seguir disfrutando lo que me toca vivir en mi carrera.

 

Es que parte de su maduración y su gran nivel en el equipo mayor de Vélez Sarsfield, la encontró en la compañía de zaga central que le brindaba por ese entonces y aún hoy, un jugador de la talla, la personalidad y la experiencia de Sebastián Domínguez. En forma de broma constante, Seba se adjudica en parte el gran nivel demostrado por Nico; y eso fortaleció aún más la relación que los une a ambos y que los potenció hasta llegar juntos a ser dupla también en la Selección. ?Siempre dije que en mi crecimiento como futbolista, Seba influyó mucho. Al tener esa experiencia y referencia futbolística al lado, para un juvenil que recién está saliendo te ayuda mucho a crecer como jugador y como persona adentro de la cancha. Él lo hizo y eso me facilitó mucho las cosas. Siempre voy a estar agradecido a él? Tampoco lo voy a decir para que se agrande (risas). A mi me ayudó mucho para poder afianzarme mucho en Vélez?, comenta Nico entre risas.

 

-Además en esos primeros partidos se la jugó poniéndote en su juego de ?Gran DT??

-Sí, me tenía y me decía que rinda al máximo que me tenía en su equipo. Bueno, le hice sumar muchos puntos? (risas)

 

Tiempo reciente atrás. Suena un teléfono. Es el suyo. La primera voz del otro lado de la línea le resulta familiar, la segunda mucho más; pero nunca al punto de saber quiénes eran y lo que estaba pasando con ese llamado. Sin saberlo estaba siendo parte de una historia impresionante, de la confirmación de su gran momento en un año en el que se le dio todo. Seguramente que al finalizar esa charla, celular mediante, recién pasadas un par de horas, habrá caído en la cuenta de que quién le hablaba era un hombre llamado Diego Armando Maradona y que lo solicitaba nada más ni nada menos, para su Selección Argentina. ?La primer convocatoria fue para el partido ante Panamá en Santa Fe. Me llamó Mancuso, su ayudante, y me dijo que Diego me quería hablar. Fue algo soñado, algo muy importante para mí porque había conseguido el campeonato con Vélez y después me llamó Maradona para convocarme. Se me paralizó el corazón? aunque primero pensé que era una joda?, dice ingenuo.

 

-¿Qué fue lo primero que te dijo?

-?Que tal Nico, soy Diego?? encima yo tengo un amigo que se llama Diego y pensé que me estaban haciendo una joda (risas). Después seguimos hablando y me dijo que estaba convocado para el partido con Panamá. Fue una alegría enorme. Estaba en la casa de mi vieja y me felicitaron todos, no podían creerlo.

 

-¿Cómo fue tener el primer trato con Maradona? ¿Se pierde con el correr de las prácticas esa sensación de ver al mejor jugador del mundo y comenzar a verlo como entrenador?

-En la primera convocatoria, lo disfrutás y lo observás como el gran jugador que fue. Después fui convocado para las Eliminatorias y ya ahí pude disfrutar un vestuario, una concentración y ya lo tomás como un entrenador; el técnico de la Selección y lo respetás de la misma forma. Siempre rindiendo y escuchando sus órdenes.

 

Si bien suma pocos partidos en la Selección en los últimos poco más de seis meses; vistiendo la camiseta nacional le ha tocado vivir situaciones límites e impensadas. Aquellos seis goles en La Paz, la dura derrota en Rosario ante Brasil; la agónica clasificación al Mundial de Sudáfrica en el Estadio Centenario, mandando a Uruguay a jugar el repechaje. Sumado a los fundamentales compromisos coperos que debió afrontar con su Vélez. Demasiada experiencia para tan poco tiempo vivido y jugado. ?Todos esos partidos son importantes. Obviamente que tu rendimiento en tu club tiene que ser importante para después ampliarlo con la camiseta de tu país. Todo suma como experiencia. Como los partidos internacionales que me tocó vivir acá en Vélez, como una Copa Libertadores o una Sudamericana. Todo suma como experiencia y aprendiendo de los referentes que tengo acá en el club?, sostiene.

 

Sonarán los primeros acordes del Himno Nacional Argentino. La mañana Argentina de la tarde Sudafricana del 12 de junio de 2010, quedará para siempre grabada en las fibras íntimas de su orgullo. Allí, con un estadio en Johannesburgo repleto de flashes parpadeantes que se llevan instantáneas de un momento histórico. Argentina se medirá ante Nigeria en el debut. Estreno también y seguramente de Nicolás Otamendi en un Mundial. Un historia que ya vivirá, cerca de la fecha, una infinidad de veces en su mente. ?Por ahí ahora no me lo imagino mucho, pero a la hora que pase seguramente va a ser un momento soñado y lo voy a disfrutar tanto como cada convocatoria en la que me tocó estar en la Selección que lo disfruté al máximo. Jugar un Mundial es el sueño de todo jugador y por eso lo vivo muy intenso. Lo voy a jugar como si fuese la última vez?, dice orgulloso.

 

-¿Qué sería un buen Mundial para Otamendi?

-Como todo jugador deseo jugar. Después trataré de ampliar mi juego y tratar también de captar todas las indicaciones del técnico. Las veces que me ha tocado jugar de lateral, pude rendirle a Diego y eso es importante. Siempre es bueno rendirle al técnico para que el equipo también tenga variantes.

 

-Te tocan vivir, por suerte, cosas muy intensas, como tu presente en Vélez, el Mundial que va a venir; pero a la vez también se hablan de intereses de clubes importantes como el Real Madrid, el Milan. ¿Hay lugar en la mente para pensar en una transferencia?

-En estos momentos no hay nada resuelto, pero obviamente que un buen futuro para mí es partir al exterior. Tuve tres campeonatos muy importantes acá, más la Sudamericana y la Libertadores; que me sirven mucho como aprendizaje y como experiencia. Sería muy importante para mí y para mi carrera tener un pase a Europa. Obviamente que siempre voy a estar muy agradecido a la gente de Vélez, porque desde un primer instante siempre me destacó por mi juego o por lo que le brindaba a la camiseta. Si tengo la posibilidad de irme, me voy muy contento con eso porque siempre amplié mis posibilidades dentro de la cancha y eso la gente me lo valoró mucho.

 

-Si te pregunto por el momento más lindo que te tocó vivir en Vélez, ¿qué es lo primero que se te viene a la mente?

-Mis comienzos. Es lógico que el título de Campeón en el Clausura 2009 es un momento soñado, por haber sido mi primer torneo. No todos los días se te da salir campeón y menos en el fútbol argentino. Acá estoy desde los siete años y obviamente si tengo la oportunidad de irme va a ser muy importante tener esos recuerdos presentes. Después contarlo va a ser muy importante.

 

-¿El momento más lindo con la Selección te lo preguntó para mediados de Julio?

-(risas)  Sí, cuando esté, si Dios quiere, cantando el himno de nuestro país y vistiendo nuestra camiseta.

 

Para el final, queda el mensaje íntimo. Como una despedida adelantada. Como una pausa en el idilio que no se detiene entre él y el hincha. Un reencuentro que quedará a la espera de su regreso; quizás tras el Mundial, tal vez mucho tiempo después. De todas formas, sea el tiempo que sea el que le lleve seguir su ascenso en el fútbol mundial siempre Vélez Sarsfield estará ligado a su apellido. Él lo sabe bien. ?Estoy muy agradecido al hincha de Vélez por apoyarme siempre en mi rendimiento dentro de la cancha; por siempre alentarme y por gritar mi nombre. Esas cosas me hicieron muy fuerte adentro de la cancha. Estoy muy agradecido y ojalá que si tengo la oportunidad de irme también tenga la chance de regresar y poder retirarme acá en el club?, cierra Otamendi.

 

Que sea con la misma forma que enamoró al pueblo velezano; esta vez para conquistar el mundo. Hasta la vuelta, Nico (en todo el sentido de la palabra).

 

Carlos Alberto Martino.