La Reserva

Crónica de un día (y un momento) para el olvido

La Reserva cayó 3-0 ante San Lorenzo e intensificó su presente de siete juegos sin ganar. Para colmo de males, Maxi Romero dejó el campo de juego por una fuerte lesión en su rodilla derecha. Tanto en su primer equipo como en Reserva, El Fortín sufre, como nunca, una racha negativa que no se detiene.

Derrota y dolor. Maximiliano Romero deja el campo de juego y la imagen lo dice todo. Vélez cayó goleado en Reserva y no encuentra el rumbo.
Por Diego Guitian

No le hablen solo de mala suerte a Vélez. En Primera o en Reserva, hay errores. De planteo o dentro del campo de juego, no es solo ''no ligar''. Asimismo, algunas cosas se escapan de la propia voluntad que se palpa, en ambos planteles, para mejorar y salir adelante. Y ahí la bendita suerte sí ocupa un lugar: un tiro en el palo, un rival que acierta lo imposible, un árbitro que no cobra lo que debe, sumado a la prueba y el error necesario e imprescindible a la que se somete cualquier jugador y sobre todo si no pasa los 21 años como se da en el 90 % del equipo.

Vélez transita un camino de espinas, extenso, que no conoce su fin y mucho menos su fondo, porque siempre se puede estar más abajo. En Primera, 3 victorias en 11 partidos y en Reserva, una en 10 juegos. Todo tiene que ver con todo y en el medio, las lesiones. Jorge Correa primero y ahora Maximiliano Romero, que si bien aguarda por un diagnóstico que certifique o descarte lesión ligamentaria, su grito de dolor presagia lo peor en materia de afecciones de rodilla.

Al margen de este momento para el olvido, hubo un partido de fútbol en el Bajo Flores, donde San Lorenzo mostró sus credenciales de puntero e invicto. Si en el equipo de Edgardo Bauza no abundan los juveniles, casi todos están en Reserva y en muy buen nivel. Pero, paradójicamente, la combinación de dos que van dejando ese rango, les permitió abrir el marcador muy temprano. Juan Ignacio Cavallaro encabezó un contragolpe letal y cruzó raudamente la media cancha dejando a toda la defensa de Vélez a su espalda, condujo hasta enfrentarse mano a mano con Gonzalo Yordan y cedió el balón para que Alejandro Barbaro lo empujara a la red. Sacó rápido la ventaja San Lorenzo y le cedió la pelota a un Vélez que supo administrarla pero muy pocas veces pudo generar peligro.

Fue Sebastián Martelli quien se encargó de abrir la cancha, ofrecer desbordes y destacarse como uno de los puntos más altos en un equipo sin ideas, pero le faltó un socio. Fede Vázquez luchó más de lo que jugó, David Vélez Cedeño pecó de individualista y Maximiliano Romero pasó inadvertido hasta el momento de su lesión. Solo Lucas Alaniz pudo generar la única jugada clara en la primera etapa con un remate que se fue muy cerca del arco que defendía José Devecchi. Hasta que en el minuto 38, sucedió lo peor. Romero fue a disputar el balón con Leandro Navarro, éste cubrió con su cuerpo y en el envión que llevaba el juvenil, pisó mal y torció su rodilla derecha. Los gritos de dolor que soltaba Maxi dejaron mudos a todos los presentes. Rápidamente lo llevaron en camilla y al poco tiempo, se retiró a su casa junto a su padre Omar y su representante, Rolando Zárate. Mañana se le van a hacer estudios en el Hospital Italiano para determinar el grado de la lesión.

La conmoción por la salida del juvenil de 16 años, pegó fuerte en el equipo y le costó volver al partido. Ya en el arranque del complemento, intentaron convencerse que podían empatarlo y la enjundia duró ocho minutos, de hecho Germán Ferreyra estrelló un cabezazo contra el travesaño, pero San Lorenzo apretó las riendas y Navarro, con un estupendo tiro libre, estiró la ventaja. Los ingresos de Favio Durán, Santiago Stelcaldo y Fabricio Alvarenga, no terminaron de surtir efecto pese a las buenas intenciones. El local seguía parado de contra y regulaba esfuerzos, hasta que en la última jugada del partido, gritó el tercero Robertino Insúa para hundir mucho más a la Reserva de Vélez que, en 10 jornadas disputadas, solamente obtuvo 8 puntos, producto de una victoria, cinco empates y cuatro derrotas.

El conjunto de Guillermo Morigi, al igual que el de Miguel Ángel Russo, lucha contra rivales y frente a sí mismo, impericia y falta de fortuna mediante. Y está obligado a dar batalla trabajando a diario para salir adelante. Cueste lo que cueste, porque la gloria que baña su camiseta así lo exige para abandonar esta racha nefasta que lo envuelve.

Síntesis del partido:

San Lorenzo (3):

1-José Devecchi; 4-Gonzalo Prósperi (ST 00´ 14-Matías Catalán), 2-Rodrigo Tapia, 6-Tomás Cardona, 3-Lautaro Montoya; 5-Daniel Ibáñez, 7-Leandro Navarro; 8-Bautista Merlini, 10-Juan Ignacio Cavallaro (ST 23´ 17-Robertino Insúa), 11-Alejandro Barbaro (ST 36´ 16-Juan Pablo Gobetto) y 9-Nicolás Reniero. Suplentes: 12-Gastón Benítez, 13-Santiago López, 15-Rodrigo De Ciancio y 18-Alexis Domínguez. DT: Claudio Biaggio.

Vélez Sarsfield (0):

1-Gonzalo Yordan; 4-Lucas Alaniz, 2-Germán Ferreyra, 6-Lautaro Gianetti, 3-Eric Jerez; 11-David Vélez Cedeño, 5-Juan Manuel Lucero, 7-Christian Da Silva, 8-Sebastián Martelli (ST 28´ 18-Fabricio Alvarenga); 9-Maximiliano Romero (PT 39´ 16-Fabio Durán), 10-Federico Vázquez (ST 15´ 17-Santiago Stelcaldo). Suplentes: 12-Tomás Figueroa, 13-Ramiro Ríos, 14-Brian Cufré y 15-Pablo Monje.

Goles: 6´ Alejandro Barbaro, 53´ Leandro Navarro y 90 + 4´ Robertino Insúa (SL)

Árbitro: Eugenio Bevacua

Asistente #1: Jonathan Ghiso

Asistente #2: Martín Urso

Cancha: Auxiliar Ciudad Deportiva de San Lorenzo.