En la lista de 19 concentrados que dispuso Alberto Fanesi para enfrentar a River, surge un nombre que por primera vez tendrá la chance de vivir una cita como esta. Santiago Cáseres, volante central de la Cuarta División y hermano de Ramiro, ex jugador del Fortín hoy a préstamo, nos contó sus sensaciones.

-Imagino que tu cabeza debe estar algo alborotada por estas horas. Pero sobre todo empezando a cumplir el sueño de tu vida.

-Por ahora estoy muy contento y no caigo porque es muy pronto. Yo creo que caeré en el momento que esté concentrando o bien si voy al banco de suplentes. Es una emoción muy grande la que estoy viviendo. El fútbol tiene estas cosas, un día entrenás en Cuarta o Reserva y por la lesión de un compañero te toca subir. Pero la verdad es que uno nunca se lo imagina; me tocó y ahora lo disfrutaré a pleno.

-¿Quién te comunicó la notica de que ibas a  concentrar con el primer equipo?

-Después del entrenamiento del jueves, me fui a cambiar al vestuario de Inferiores y llega Guillermo Morigi muy normal a comunicarme la noticia, pero para mí no tenía nada de normal porque fue un notición.

-Te tocó integrar el grupo que dispuso Alberto Fanesi para trabajar tácticamente, ¿no sospechabas algo?

-Uno se da cuenta que unos días antes se prepara el equipo para el fin de semana y que me ponga de suplente de Kolacha Desábato me hacía intuir que algo iba a pasar. Creo que también tuve algo de suerte que Morigi hay subido como interino, me conoce y sabe cuáles son mis condiciones.

-¿Cuánto tiempo llevás en el club?

-Estoy transcurriendo el décimo año en Vélez, entré por mi hermano en el 2006. Ahí empecé a jugar pero me costó mucho porque estaba algo excedido de peso y todo me costaba el doble. Por suerte lo pude mejorar el año pasado. El sacrificio tiene su recompensa.

-¿Lo viviste como un drama?

-A ver, yo sabía que no era obeso pero estaba regalando unos cuantos kilos y eso en el fútbol profesional y más como es el argentino, es mucho. Bajé 9 kilos en menos dos o tres meses el año pasado cuando estaba en Quinta División. Creo que fue un año clave porque sabía que se me acortaba el tiempo. Me lo habían dicho muchas veces el tema del peso y me costaba tanto entenderlo como llevarlo a la práctica.

Santiago recuerda que sus primeros años jugó como marcador central en la Categoría 1997, la misma que ya vio debutar en Primera Nicolás Delgadillo, Matías Vargas y Lucas Robertone. Con el tiempo, la estatura no lo ayudaba y por eso pasó al mediocampo, por sugerencia de Gerardo Rojo. Hoy se convirtió en un volante central de quite pero sobre todo elegancia para distribuir el balón. Diestro, no tiene problemas en jugar a uno o dos toques o disponer un cambio de frente producto de su gran pegada. Toma riesgos con la pelota en los pies, prefiere pensar a tener que sacársela de encima, por eso asegura que "es algo natural que tengo, trato de hacer las cosas así y es lo que mejor me sale, creo que lo hago bien y por algo estoy donde estoy".

-¿Qué dice tu familia al enterarse de este llamado?

-Mis viejos me siguen a todos lados y creo que están más contentos ellos que yo. Ramiro se enteró y si bien es de pocas palabras, me felicitó y eso ya me puso muy feliz. Estoy muy ansioso, esperando el momento de ver si quedo o no en el banco pero ya con concentrar por primera vez me predispone para seguir creciendo. Esperé toda mi vida este momento.