Este domingo 15 de marzo, se cumple un año del cruel asesinato del joven hincha de Vélez, Emmanuel Álvarez. El tiempo no supo curar el dolor de una herida que quedará por siempre abierta en el sentimiento de todo el pueblo velezano, de todo el mundo fútbol.
Un año si tu aliento constante desde aquel sector que hoy necesariamente lleva tu nombre. Un año de repetirnos las mismas preguntas y sentir que ha pasado un año sin encontrar ni siquiera una respuesta a tanto interrogante que se escapa por la boca, por el corazón.
Un año en el que nos sentimos más cerca, en el pedido interminable de justicia. Una justicia que se ha tomado un largo tiempo, pero que de todas formas no llega a cubrir un gramo siquiera del dolor que abruma.
Un año de gritarle al viento unas cuantas verdades que él mismo no quiere escuchar. Un año en el que te supimos conocer, amar, ayudar; por más que estés tan lejos, que estés tan cerca.
Un año, Gordo? Emma, un año de extrañarte?
Un año de esperarte, sabiendo aún que no vas a volver de la forma de siempre, por más que te hayas alquilado un palco vip allí arriba para alentar a tu amado Fortín desde una nube.