Con goles de Maxi Porcel y Francisco Pozzo, la Reserva dio vuelta un partidazo y venció 2-1 a Boca en Ezeiza. Gran segundo tiempo de los pibes de Vélez que con agallas y fútbol lograron clasificar a una nueva final del Torneo Proyección. Definirán el título con San Lorenzo.
AURA es la de Vélez en Reserva. Esa palabra que en la lengua española tiene múltiples significados, por estos tiempos da cuenta de un talento excepcional que, sumado al carisma, redundan en un "estado de gracia" total. Y por supuesto que es así. Los dirigidos por Marcelo Bravo pueden catalogar perfecto para representar la palabra en cuestión, porque cambian los nombres y la idea se mantiene. Ya sumaron tres títulos y ahora van por su cuarta final en dos años. Heroica tarea la de siempre ser protagonistas.
El encuentro arrancó cuesta arriba para El Fortín. A los 11 minutos del primer tiempo, el local se adelantó en el marcador: tras un centro atrás de Santiago Zamperi, Lautaro Mendieta apareció por el centro del área para definir arriba y poner el 1-0. Durante ese tramo inicial, Boca incomodó los intentos ofensivos de Vélez, que solo pudo ofrecer tenencia de pelota sin profundidad.
A los 33', el partido tuvo un giro: Bautista Ramírez en Vélez y Leonel Flores en Boca fueron expulsados tras una agresión mutua que el árbitro sancionó con roja directa para ambos. El resultado parcial se mantuvo hasta el descanso.
En el complemento, Vélez mostró otra cara. Desde el inicio, los ingresos de Maximiliano Porcel y Francisco Pozzo le dieron mayor presencia ofensiva, mientras que Tiziano Croci -que ya había ingresado en la primera etapa por la lesión de Thiago Villalba- también resultó determinante. Pese a una primera gran intervención de Álvaro Busso para negarle el segundo tanto a Valentino Simoni, El Fortín se adueñó del trámite.
A los 13?, llegó el empate: tras una buena acción individual, Croci recibió una infracción dentro del área y el árbitro sancionó penal. Desde los doce pasos, Porcel ejecutó con potencia y precisión, rematando alto y ligeramente hacia la derecha del arquero para marcar el 1-1.
Vélez siguió empujando en busca de la victoria. A los 38', Porcel volvió a ser determinante: en una de sus arremetidas generó la expulsión de Matías Calegari en el conjunto local. Un minuto más tarde, Mateo Acuña desbordó con autoridad, envió un centro perfecto y Fran Pozzo, ganando de arriba como un verdadero 9, conectó de cabeza para poner el 2-1 definitivo y desatar la euforia.
Sobre el cierre, Mirko Bruno vio su segunda tarjeta amarilla y posterior expulsión, por lo que tanto él como Ramírez se perderán la gran final frente a San Lorenzo, que se disputará el próximo domingo, con escenario a confirmar.
Victoria inolvidable, bajo un frío estremecedor y momentos de lluvia. Garra y talento al servicio de dar vuelta un resultado adverso. En los últimos dos años, la Reserva ya ha conquistado la Liga y Trofeo de Campeones 2023 y la Copa de la Liga del primer semestre 2024. Una muestra más del enorme trabajo de Marcelo Bravo y de varias camadas de juveniles que siguen posicionando a Vélez como referencia indiscutida en divisiones formativas y Reserva. Y ahora van por más. Lo que se dice un equipo con AURA.