No llega a 70 partidos en Primera y el cariño que siente el hincha por él, es cada vez más grande. Quizás, como le dijo uno de los Socios Vitalicios que estuvo presente en la velada, "los hinchas de Vélez te agradecemos que hayas transpirado la camiseta cuando teníamos la soga al cuello" ya es síntoma de admiración y respeto. También del otro lado, porque asegurar que "haber llegado a este club, teniendo posibilidades firmes para irme a Europa, fue la mejor decisión de mi vida", es mucho más que una declaración de principios, es una manifestación de amor que encima es correspondido entre ambas partes: El hincha Fortinero y Matías Ezequiel Vargas.

El joven enganche nacido y criado en El Fortín, tuvo su primer encuentro con los Vitalicios y habló de todo en el Salón Vip del tercer piso. Efusivo fue su recibimiento, dado que se mantuvo en secreto quién iba a ser el invitado para celebrar los cumpleaños de los meses 7, 8 y 9 del calendario. Luego de la presentación del Presidente del Departamento, Jorge Grinstein, los 150 invitados explotaron en un estruendoso aplauso al verlo ingresar al Mono.

El Periodista Carlos Cárrega ofició de presentador para que Vargas fuera narrando sus inicios en el Fortín allá por 2011, en Novena División. El descubridor de su talento fue Sebastián Pait, hoy Coordinador General de Divisiones Juveniles. "Llegar a Vélez fue hermoso pero a la vez muy duro al comienzo, quería volverme a mi casa en Mendoza. Recuerdo que los primeros tiempos les pedía a mis viejos que si un domingo se juntaban a comer con la familia, no me mandaran fotos. Era muy difícil para mi ver esas imágenes estando en la pensión; extrañaba mucho", confesó Vargas.

Pero al poco tiempo, su incursión en Liga Metropolitana dado que AFA no jugaba, lo fue dotando de mayor confianza. "Fue muy importante la figura del entrenador Flavio Espósito, a quien adoro y con quien tengo una relación espectacular. Estuvo en los peores momentos y nos bancó mucho, tanto a mi como a Santi Cáseres o a Hernán De La Fuente. Nos puso el hombro, nos escuchó llorar. Es uno de los técnicos que más me marcó", resaltó Matías, mientras las preguntas de los Vitalicios comenzaron a escucharse en el recinto.

Cómo es la relación con Gabriel Heinze, el buen semblante que reina en el plantel ("somos muy unidos, hay una gran química entre todos"), cuál fue el gol más lindo de los 12 que convirtió o bien, quién es su socio ideal dentro de la cancha; algunas de las preguntas que se escucharon. "Con Lucas Robertone nos entendimos mucho en Inferiores y claro que ahora también. Lleva 8 goles y 5 fueron asistencias mías", aseguró sin dudar. Cada respuesta brindada era seguida con atención por todos los presentes y los aplausos cerrados se hicieron sentir cuando el invitado empezó a describir su amor por Vélez.

Midiendo sus palabras, pensando cada letra pero abriendo su corazón, Matías Vargas no prometió cosas que no sabe si va a poder cumplir. Pero de algo está convencido: "Vélez me hizo cumplir mi sueño. Es muy lindo ver como el hincha me reconoce, o bien encontrar la calidad de personas que acá conocí, entre ellas a mi novia quien fue compañera mía en el secundario. Vélez es mi hogar, me siento como en casa y no fue difícil enamorarme de este club".

El sentido de pertenecia volvió a ser explícito cuando el Mono expone. Dueño de un respeto admirable por la institución que lo formó como jugador y persona, Vargas pasó una gran momento junto a los Socios Vitalicios. De esos que son inolvidables para cada una de las partes.

El último encuentro del año con los Socios Vitalicios también contó con la presencia de Aníbal Chavero y su música, sorteos y una apetitosa recepción para todos los presentes. Felices, los agasajados vivieron una tade noche repleta de emociones en casa.