Socios

“Que Dios bendiga al Flaco Gareca”

Fiel e incondicional en cualquier cancha, refrendando cotidianamente su pacto de amor con Vélez a través de sus actitudes y su testimonio, Roberto Martínez, el Gallego Martínez, mi homónimo, responde el cuestionario del Rincón del Hincha y repasa parte de sus 70 años de pasión por los colores velezanos.

Transpira en la popular, el calor es insoportable, que importa. Munido de su bandera se acomoda detrás del paraavalanchas y aguarda, siempre en la misma ubicación, la llegada de sus amigos de siempre. Fiel e incondicional en cualquier cancha, refrendando cotidianamente su pacto de amor con Vélez a través de sus actitudes y su testimonio, Roberto Martínez, el Gallego Martínez, mi homónimo, responde el cuestionario del Rincón del Hincha y repasa parte de sus 70 años de pasión por los colores velezanos.

 

1-¿Cómo, quien y porque te hizo hincha de Vélez?

Mi viejo era socio vitalicio y fanático, yo nací en el 40, y papá me traía a este predio cuando estaba tupido de ligustrina. Toda mi familia, mi mamá, mi hermana y mis hijas son simpatizantes de Vélez. La pasión se va trasmitiendo de generación en generación, asegura.

 

2-¿Cuál es el primer partido que guardás en tu memoria?

Estuve el día que se inauguró la cancha, en 1943, frente a Ríver, pero era muy chico, los recuerdos son muy vagos. Más tarde me acuerdo un partido en cancha de Ferro contra Lanus que el equipo salió a jugar el primer tiempo con la camiseta verde de Ferrocarril Oeste porque no se había llevado vestuario alternativo y se confundían los colores. La gente silbaba y encima perdíamos 2 a 0, y completa, para la segunda etapa se trajo la casaca tradicional y terminamos ganado 3 a 2. El Gallego, figura repetida en la tribuna, continúa, a los 13 años me largué solo, vivía en Pola y Rivadavia, y la barra se juntaba en casa para salir en camión hacia la cancha. No olvido un partido en Avellaneda donde junto con mi amigo Pirulo y los mellizos Gatti le rompimos una matraca en la cabeza a un hincha del rojo, acota sonriendo.

 

3-Un directivo

Dos. Don Pepe Amalfitani y Raúl Gámez. El viejo fue muy honrado y laburador. En una ocasión le pregunté, ¿Cuándo vamos a salir campeones?, me miró fijo y me contestó, ?Si queres ser campeón hacete de River o Boca, no te das cuenta que cada socio nuevo es un campeonato?. Raúl es mi amigo, lo aprecio mucho y le dio al fútbol de Vélez la importancia que merecía. No puedo dejar de mencionar a tipos que entregaron mucho por el Club como Chutchurru y Mousseaud.

 

4-Un jugador

Daniel Willington. Era extraordinario, me enloquecía, me encandilaba. Una vez me había comprado unos zapatos de gamuza y fui a ver un partido de juveniles, estaba contra el alambrado cuando sentí calor en los pies, miré el calzado y estaba mojado, Daniel me los había meado (sic). ¿Qué haces Loco?, le dije, ?Te estoy bautizando los zapatos?, me respondió. Además de gran jugador, Daniel era muy bromista y ocurrente.

 

5-Un técnico

Carlos Bianchi. Lo estimo un montón y siempre se portó muy bien conmigo. Y tengo un gran cariño por Bielsa; serio, concentrado, honesto, de predica sincera y cultivado espíritu docente. Como delegado de la reserva entraba al vestuario atemorizado y hablando bajito porque nunca se reía, pero es una gran persona. En la Plata, la tarde que dimos la vuelta, descubrí una faceta de su personalidad desconocida, lo vi llorando de alegría, saltando y festejando con los chicos la obtención del titulo.

 

6-El gol que más gritaste

El del Turco al Milán. Lloré en mi casa. No pude ir, una lástima, lo lamenté mucho.

 

7-El mejor gol de todos los que viste

Uno de ?El Cordobés? frente a Atlanta, gambeteó medio equipo rival, el árbitro detuvo el cotejo para felicitarlo. Y otro de Daniel en cancha de Banfield al arquero Righi en posición de wing derecho, un chanfle sensacional.

 

8-¿Cual fue el partido que te provocó mayor felicidad?

La victoria en Japón por la Intercontinental, y el día que fuimos campeones en el 93. Volví de la cancha todo mojado y me puse a escuchar Independiente- Belgrano en la voz de Bullrich, los minutos finales fueron interminables, cuando gritó Vélez Campeón, besé la foto de mi viejo, temblé, y recordé emocionado a todos mis amigos velezanos fallecidos.

 

9-Tu equipo ideal

Chilavert; Gallo, Trotta, Sotomayor; Cardozo; Conde, Ruiz, Willington; Sanssone, Bianchi y Carone. Seria injusto si dejara fuera de esta reseña a la formación del 53, enfatiza.

 

10-Una anécdota.

Saliendo del Gasómetro, montados en el camión, nos persiguió la barra del ciclón para robarnos la bandera. Sin dudarlo agarré el clarín de Roninelli (hermano de Marilina Ross), y empecé a repartir clarinetazos contra todo el mundo. Salvé el trapo pero el instrumento quedo hecho pelota, (risas).

 

11-Un deseo para el Centenario

Como delegado de futbol amateur, anhelo que los hinchas tengan paciencia con los pibes del club, que son mi debilidad, aclara, y que los defendamos porque tienen condiciones y muchas ganas. Y deseo que Dios ilumine y bendiga al Flaco Gareca y podamos ser nuevamente Campeones de America,  es lo más lindo que me voy a llevar de esta vida.

 

Ganó Vélez. Envuelto en sus colores el Gallego ya piensa en la próxima fecha y emprende feliz el regreso a casa.

 

Gabriel Martínez.