Prensa

A mano con La Bomba

En el Salón Vip del Tercer Piso de la sede, este lunes no fue uno más. Diego Zabala dialogó francamente con los Socios ganadores, Laura, Javier y Jorge. El presente del equipo, su estadía en el país y mucho más, tuvo lugar en una charla amena.

Laura, Jorge y Javier se retratan con la camiseta de Diego Zabala, otro de los futbolistas que pasó el Mano a Mano.
Por Diego Guitian

n el Salón Vip del Tercer Piso de la sede, este lunes no fue uno más. Diego Zabala dialogó francamente con los Socios ganadores, Laura, Javier y Jorge. El presente del equipo, su estadía en el país y mucho más, tuvo lugar en una charla amena.

Con su simpatía habitual fuera del campo de juego y una "paz uruguaya" que irradió tranquilidad a los presentes, Diego Zabala se despachó con un gran Mano a Mano junto a los Socios ganadores. La cita era 19.30 pero los cuatro llegaron mucho antes y la charla no se hizo esperar. Como en todo ida y vuelta, sentirse cómodo es la clave para dejar fluir sensaciones y ofrecer las respuestas más sinceras. Y así sucedió, una vez más en el Salón Vip del Tercer piso.

Laura Strajilevich, Javier Muscatello y Jorge Franco abordaron la vida de Dídí, o mejor dicho, La Bomba, como fue bautizado en su arribo al Fortín. Sus orígenes en el fútbol uruguayo, su paso por Racing de Montevideo, las expectativas por cumplir que tiene en Vélez, en qué posición se siente más cómodo y por supuesto, el momento del equipo, fueron algunos de los vectores que atravesaron la charla durante los 45 minutos que duró el encuentro. 

"La verdad que fue un momento muy bueno. Le pregunté a mis compañeros cómo se vivía un mano a mano porque no sabía qué te podían preguntar, pero respetuosamente se tocaron muchos temas y me hablaron mucho de la historia del club. Me alegra el cariño del hincha, es muy lindo. Espero cada domingo demostrar en la cancha tanto afecto", comentó Zabala, vestido de negro y a la moda pero curiosamente, sin mate para pasar la velada.

Laura Strajilevich manifestó que "fue una muy linda experiencia tener un jugador de cerca. No lo podía creer cuando salí sorteada, era la primera vez que mandaba el mail porque no me tenía fe pero esta vez tuve suerte". Y respecto sobre qué cosas le preguntó a Diego, dijo: "Quería saber con quién mejor se llevaba y me dijo que con Pavone, vuelven juntos de los entrenamientos porque viven cerca. También habló del presente que vive el equipo y me dijo que están en un proceso de transición, de cambio, en la cual hay que tener paciencia pero me prometió que vamos a salir adelante".

Para Jorge Franco, estar en su casa, como lo es el Amalfitani, no tiene precio. Y mucho más si se trata de un encuentro con uno de los jugadores a los que alienta permanentemente. "Desde el 2012 que envío el mail a Prensa para poder estar en los Mano a Mano pero recién ahora tuve la suerte de ser elegido. La verdad que lo disfruté mucho, todo jugador siempre esconde algo pero Diego me pareció muy claro, habla muy bien y se mostró muy enamorado del club". 

 Javier Muscatello, fiel a los tiempos modernos, le pidió una selfie a Zabala y a igual que los otros ganadores, quedó muy satisfecho con el encuentro. "Me anoté por primera vez y quedé. Fue una alegría enorme, no lo esperaba y la verdad que la pasé muy bien. Estaba un poco nervioso pero ayudó la muy buena onda del "Uru". Desde antes lo quería por como se muestra, es uno de los jugadores que más me gusta. ¿Si me firmó la camiseta? No, el banderín. Su camiseta la quiero usar yo",

Así pasó un nuevo Mano a Mano, el anteúltimo del año. La Bomba Zabala resultó un anfitrión de lujo que "explotó" en simpatía y muy buen humor para acercarle al socio, la personalidad de un hombre que sabe lo que quiere y que desea conquistar sus sueños en Vélez.

39 IMÁGENES

Mano a Mano Diego Zabala

Mano a Mano Diego Zabala

En el Salón Vip del Tercer Piso de la sede, este lunes no fue uno más. Diego Zabala dialogó francamente con los Socios ganadores, Laura, Javier y Jorge. El presente del equipo, su estadía en el país y mucho más, tuvo lugar en una charla amena.