El 27 de octubre de 2001 se lanzó el primer número del Diario El Fortinero. Y este jueves tuvo lugar una cálida recepción para festejar los 15 años de una publicación que sigue diciendo presente cada vez que Vélez juega de local. Su creador, Daniel De Benedetto, recibió una distinción de la Comisión Directiva.

Aquella idea bosquejada en un turbulento 2001, es la razón de ser de El Fortinero. Narciso Juan Romani, Editor del Diario y hombre de la gráfica, lo convenció a Daniel De Benedetto de materializar su idea: "Nene, tenemos que hacer el Diario, convencete que este es el momento". El 27 de octubre de aquel año, salió a la luz el primer número. Vélez derrotaba 2-0 a Argentinos Juniors y Roberto Nanni, goleador de aquella noche en Caballito, fue la primera foto de portada de este medio que hoy cumple 15 años de existencia y sueña con muchos más.

Un poco de locura, como dice la canción, tras varias noches en la que sus amigos le terminaron de dar el empujón y por supuesto, el infaltable y necesario aporte de los auspiciantes; Daniel llevó adelante "su criatura" en base a "ver la realidad de manera positiva, con mucha fe y siempre alentando al equipo como todas las actividades que se realicen en el club. Y si hay que criticar, se hará de manera constructiva", como bien emana de su línea editorial. El Fortinero tiene 15 años en la calle, domingo a domingo o cualquier día que Vélez juegue de local, allí estará esta publicación gratuita y llevada adelante con mucho amor y sacrificio para informar sobre la realidad de nuestra institución.

La noche aniversario se abrió paso a partir de las 21 en el Salón Vip del Tercer Piso de la sede. Entre los presentes, acudieron de parte de la Comisión Directiva, Raúl Gámez, Guillermo Pizzoglio, Hugo de San Félix, Raúl Argüelles, Bernardo Bertelloni, Mabel Hansen, Carlos Maceira, Marcelo Cilotta y Carlos Figueroa. De igual forma, miembros de la Agrupación Amalfitani encabezados por su Presidente Fabián Berlnga y los integrantes del órgano de Fiscalización. 

Daniel De Benedetto agradeció con especial atención a cada uno de los auspiciantes que colaboran con la publicación del Diario. Uno por uno, el Nene siguió reconociendo a casi todos los presentes y hasta se animó a relatar una historia de cada uno de los ex jugadores de Vélez que se ubicaron en una de las mesas principales: Daniel Willington (una de las atracciones de la noche), Juan Carlos Carone, Néstor Sinatra y Osvaldo Damiano. Por su puesto, la familia de Daniel, compuesta por Liliana, Christian (el actual Director del Diario) y Julián, se llevó una de las tantas ovaciones de la velada.

Tuvieron lugar distintos picos de emoción, como cuando De Benedetto tomó su guitarra y entonó diversos temas musicales. Covers y también de autoría propia, como la canción que le hizo a Willington, quien llegó especialmente de Córdoba para presenciar el evento. Y hablando del "famoso cordobés", también se animó cantar a capela el tango "La última Curda". Borrachos de pleitesía, los presentes ovacionaron al ídolo del Fortín.

La Comisión Directiva le entregó al fundador del Diario El Fortinero una plaqueta homenaje y una camiseta de Vélez enmarcada con el número 15. "¿Sabés por qué la gente te quiere? Porque te mostrás siempre como sos, auténtico. Felicitaciones por este aniversario de un diario que siempre tira buena onda", espetó Gámez. De Bendetto, emocionado, agradeció las palabras del Presidente de la institución y recordó distintas anécdotas que vivió con su "tercer hijo" de tinta y papel. Una de ellas, sin duda alguna fue espectacular. "Cuando jugaba en Infantiles, le hicimos una nota Jonathan Cristaldo. Con el tiempo, Churry me comentó que no sabía leer ni escribir y que aprendió a leer para disfrutar de su primer reportaje". Realmente, una anécdota sensacional en la boca del Nene.

Quince años llenos de amor y compromiso a la hora de la información. Vueltas olímpicas reflejadas en sus páginas y las primeras notas en su etapa amateur de un tal Mauro Zárate, entre miles de publicaciones. El Fortinero es el producto de dos amigos y otros tantos que impulsaron aquel primer número. El sueño del loco ya no es tan sueño, es realidad, es presente, trabajo y humildidad mediante, futuro en las gradas del Amalfitani cada vez que juegue el Fortín.