Distintas y de las más variadas instantáneas pueden pasar por la mente de un velezano/a cuando se le pregunta con qué imagen mental representan al club de sus amores. Una, tranquilamente, puede ser la que en reiteradas ocasiones se presentó ayer en la gramilla del Amalfitani, en lo que fue la Fiesta de cierre de año del Fútbol Recreativo: Cientos de chicos con la V en el pecho corriendo a los largo del campo de juego. En tanto club social, una de las principales funciones de Vélez Sarsfield es cobijar y ver crecer a sus jóvenes, brindándoles la contención necesaria en su desarrollo y también los espacios necesarios para que den rienda suelta a su algarabía. ¿Quién no soñó con jugar al fútbol alguna vez en el José Amalfitani? Ayer, varios chicos comenzaron a cumplir el sueño de todos.

La jornada comenzó a las 17.30. Las adyacencias del José Amalfitani veían llegar a grupos familiares enteros para llevar a su hijo, nieto, hermano, primo o sobrino a la Fiesta más esperada. La que cierra con un año de arduo trabajo y formación de quienes eligieron una de las actividades que mayor caudal de socios le brinda a la institución. Un total de 700 chicos recibieron su trofeo y pisaron el verde césped para patearle penales y tiro libres a Tomás Figueroa, tercer arquero del Plantel Profesional, mientras hacían alguna finta para distraer la marca de Nico Domínguez, otro de los productos de la cantera velezana que se acercó al Amalfitani. Los pequeños jugadores también tuvieron el placer de probar la resistencia bajo los tres palos de Pablo Cavallero, Manager del Fútbol Profesional. El ex arquero mundialista pasó un grato momento volviendo a pisar la gramilla que lo vio nacer en el fútbol grande, a mediados de la década del 90.

El Presidente de la institución, Sergio Rapisarda, junto al Vicepresidente 1°, Diego González, estuvieron presentes en el acto junto a buena parte de la Comisión Directiva. Asimismo, las autoridades de Fútbol Recreativo: Jorge Di Netti (Presidente), Gustavo Constatino (Vicepresidente 1°), Daniel Ortiz (Vice 2°), Luis Medina, Ivan Garcia y Pablo Cannone.

Más de 1600 padres y familiares se alojaron en la Platea Norte baja. Vale resaltar la total gratuidad del evento, en el que no se cobró ningún tipo de arancel para ver jugar a sus pequeños. Todos tomando fotos de lo que fue un itinerario soñado: Ingreso al Estadio por donde hacen lo propio los Jugadores Profesionales, arribo a vestuarios para conocer dónde se cambian sus ídolos y la posterior salida al césped por la manga con las torres del “viejo fortín”. Inmejorable postal de la que participaron 22 colaboradores en las distintas postas, sumado a los allegados y entre todos velaron la seguridad de los niños. Así, 120 equipos pertenecientes a las Categorías 2000 a 2011, con su respectivo Entrenador y Delegado, fueron ingresando al José Amalfitani, y luego de correr y exigir a los arqueros, recibieron cada uno su trofeo y respectivo refrigerio.

“Estamos emocionados, es la primera vez que llevamos este evento adelante. Los chicos se sintieron futbolistas profesionales al menos por un rato y con tan solo ver sus caras pudimos observar que lo disfrutaron mucho. Mismo sus padres, alojados en la Platea Norte, y a quienes les agradecemos por confiarnos el cuidado de sus hijos”, apuntó Jorge Di Netti.

El Estadio José Amalfitani le abrió sus puertas a sus pequeños jugadores del Fútbol Recreativo, en la Fiesta de fin de año. Fue la primera vez para muchos de ellos. Quizás en un tiempo no muy lejano, sea la primera de varias pisando el verde césped de uno de los campos de juego más lindos del mundo.