Fervoroso por su primer gol con la camiseta de Vélez y que encima valió un triunfo, Jonathan Ramis dijo que "trabajo día a día para que cada vez que me toque jugar, pueda hacer lo mejor. Siendo delantero hay que convertir, pero la alegría del triunfo no me la quita nadie". 

Tras el pase atrás de Matías Melluzo que no pude recepcionar Gonzalo Piovi, comenzó la carrera desenfrenada del uruguayo. Tenía opción de habilitar a Thiago Almada pero su instinto no lo traicionó. "Me quedó mano a mano contra el último central, no miré para ningún lado y traté de definir yo. Por suerte pudo entrar", describió el delantero oriental.

El aplauso cerrado del hincha fortinero cuando dejó el campo de juego, llegó a los oídos del goleador. Y también a su corazón: "Le quiero agradecer a la gente, desde el primer partido me reconocieron el esfuerzo, la entrega. Por más que no pude convertir antes, estoy muy agradecido y el triunfo es para ellos".

Ramis también tuvo palabras de concordia para Gabriel Heinze, con quien se fue a abrazar tras su conquista. Todavía con las pulsaciones "a mil", dijo en referencia a ese gesto: "La verdad no me conoce nadie. Estoy formando una carrera en Argentina pero un tipo que jugó toda la vida en Europa, con los mejores jugadores del mundo, la verdad que se fijara en mi...creo que algo tengo, tan malo no soy. Tengo que trabajar partido a partido y devolverle esa confianza".

Diego Guitian