Fútbol

“Fuimos merecedores del triunfo”

Matías Vargas también dialogó con la prensa y brindó sus sensaciones tras consumar el triunfo en casa. "Se dio el partido que imaginábamos y sabíamos que no podíamos fallar", destacó el Mono. Con su asistencia, permitió el gol que desató la euforia no solo de su amigo Robertone, también de todo Vélez.

Por Diego Guitian

Para Vargas, el punto conseguido en Córdoba y los tres de hoy "tienen el mismo valor. Fue muy importante desde lo anímico ante Belgrano, un rival directo, y eso nos sirvió para poder llevar a la práctica lo que queremos. Sumar es lo más importante y esperamos seguir así".

En referencia a qué encuentro craneaba en la previa, el Mono fue directo. "Se dio como imaginábamos. Nos hubiese gustado presionarlos más arriba, no estuvimos del todo finos pero hicimos varias jugadas que nos llevaron a ser merecedores de ganar el partido".

Su persistencia en no dar por perdida la pelota en la jugada del gol, hizo que Vargas se erigiera como una de las figuras de la noche. Jugó mayormente por izquierda pero, en la sociedad determinante con Robertone, se paró por el otro extremo. Y el propio jugador explica el porqué: "Terminé cerrado en esa jugada porque recuperé la pelota y siento que no tenía referencia de marca para River, dado que Camilo Mayada, mi marcador, estaba por derecha".

"Estoy para jugar donde me toque, con esta camiseta no tengo problemas de hacerlo en cualquier posición. De chico jugué siempre de enganche y desde hace un año, por izquierda. ¿Dónde puedo rendir más? No lo sé, ahora me toca jugar acá y trato de mejorar siempre".

Una de las claves para superar a River fue la manera que tuvo Vélez de someterlo para sacarle el balón. "En lo defensivo hay que dar ese plus cuando no tenemos la pelota. Presionar mano a mano genera un desgaste grande pero tiene su rédito posteriormente. Y hoy logramos eso, hacer equivocar al rival para crecer nosotros", remarcó el Mono.

"Ganarle a uno de los clubes más grandes de la Argentina nos satisface, reconocío el volante de 20 años, sin dejar de mencionar que "habían ganado los rivales directos y esta era una final en la que no podíamos fallar".