Fiel a su política de promover jugadores de sus Divisiones Inferiores, el Fortín ofreció cuatro debuts en la máxima categoría durante el Transición 2016.  Maximiliano Romero, Santiago Stelcaldo, Nicolás Servetto y Gonzalo Yordan tuvieron la posibilidad de cumplir su sueño y demostraron estar a la altura.

Durante la fría noche de Junín, el 8 de febrero cuando arrancaba el campeonato, Maximiliano Samuel Romero hizo su presentación en la Primera División ante Sarmiento. Con la derrota como cirscunstancia de estreno, el Tigre sumó apenas seis minutos en los que no pudo demostrar todo su potencial de gran goleador que venía insinuando desde la cantera. Pero en la fecha siguiente, Bassedas le volvió a dar la chance y desató la euforia con su gol agónico ante Olimpo para el 2-1 en Liniers. Con tan solo 17 años y ofreciéndose en su mejor versión detrás de un 9, Romero sumó en total 11 partidos en el Transición 2016 y uno por Copa Argentina, contabilizando un total de 3 goles. Después de un 2015 complicado en cuanto lesiones, el Tigre pagó con goles e interesantes movimientos, la espera de todos por verlo jugar.

El 29 de febrero de 2016, Santiago Stelcaldo lo tendrá marcado a fuego de por vida. Corría la fecha 5 del certamen y Gimnasia se estaba llevando un empate del Amalfatini. Vélez intentaba ir por la victoria pero fallaba en los metros finales. El nacido en Brinkmann, Provincia de Córdoba, ingresó a los 14´ del segundo tiempo en reemplazo de Fabricio Alvarenga y en el epílogo del encuentro, desató la euforia con un tiro libre que se coló por el segundo palo del arquero Bologna. Luego, en la décima, volvió a gritar al encaminar un triunfo histórico ante Rosario Central. Con 8 partidos jugados y dos goles, Steca le devolvió la confianza a un Bassedas que desde que llegó, quedó encantado con su técnica y movimientos ofensivos.

Aquel 10 de abril en Rosario, hubo otro debut cuando el partido no estaba resuelto y había que ir por el empate transitorio. Ante el Canalla, Nicolás Servetto reemplazaba a Yamil Asad para aportar mayor fuerza en ofensiva. A diferencia de Romero y Stelcaldo, el Pampa no pudo marcar goles pero ya desde aquella noche en la Chicago Argentina, demostró su tenacidad para moverse como centrodelantero y pivotear muchas pelotas, tal el caso del partido siguiente ante Argentinos en Liniers donde fue titular. Las ausencias de Pavone, Romero y Toledo en la previa del encuentro, le dieron la chance a un Servetto que hasta entonces entrenaba con Cuarta División y ahora suma 4 partidos disputados para mantenerse en el Plantel Profesional.

Hace unos años se decía que Vélez no sacaba arqueros de sus Inferioes. Bernardo Leyenda, a comienzos del 2000, había sido el último en presentarse bajo los tres palos. Alan Aguerre rompió la sequía y arribó a Primera en 2013. Pero abajo siempre se trabajó muy bien para formar guardametas, sólo faltaba brindarle la chance a alguno más. Ante la lesión de Fabián Assmann (ya fuera del campeonato) y la correspondiente dolencia que alejó a Aguerre del partido ante Banfield, Gonzalo Yordan se presentó en sociedad 16 de mayo. Casi de sorpresa pero dando la talla y augurando un gran futuro, el oriundo de Morteros (Córdoba) contribuyó de manera magnífica para mantener la valla en cero. Y claro está, también es partícipe de la racha histórica que ostenta Vélez de seis partidos consecutivos sin recibir goles.

Cuatro nombres vieron la luz en la Primera. Tres de ellos vivieron en la Pensión del club, un dato para nada irrelevante si tomamos el dinero que invierte Vélez en formar a sus juveniles. Hasta acá, tomando sólo seis meses como referencia, la cifra de los debuts mermó respecto a todo el 2015, donde fueron un total de 10 (6 eran del interior del país).

Del complicado año pasado en cuanto a resultados, a este presente con mayor cantidad de puntos y sueños de mejora en el corto plazo, cuatro nombres asomaron y van por más. Siempre es necesario recordar que nunca un jugador que debuta en la máxima categoría, está 100 % preparado para asumir el reto, más bien necesita tiempo de formación que no siempre son los tiempos de la histeria que reina en el fútbol.

La juvenutd se va abriendo paso. Pero no por ser un club que históricamente respalda a su cantera, es cuestión de promover por el simple hecho de hacerlo. Todo requiere una planificación, la cual debe ser respetada y no precipitarse cuando los resultados no vienen de la mano. Con un Vélez menos urgido desde lo económico en este 2016, los nombres de experiencia fueron aumentando y los chicos amalgamaron mejor lo vivido, de la mano de Christian Bassedas, en un Plantilla en la que sigue imperando la juventud pero ya tienen otro camino recorrido, con mayor confianza y menos golpes recibidos.