Temperamental. Así lo vivió. Con la sangre bullendo por sus venas. Entrando en el juego estratégico del rival, pero mostrando a la vez unas dosis gigantes de personalidad que no se consigue habitualmente en el fútbol argentino. Sin embargo, su gran condición de referente, lo llevó a calmarse en el complemento y a cumplir un encuentro sin fisuras.

 

Sebastián Domínguez, de todos modos, fue quien se mostró más autocrítico sobre la gran cantidad de amarillas que sufrió el equipo durante el primer tiempo; a la vez que destacó la importancia de haber cerrado el encuentro y cosechado los primeros tres puntos de una competencia salvaje.

 

?Si no hacíamos el segundo gol, en cualquier noche te pueden complicar. Así nos pasó con Liga acá; en un partido que nunca nos habían atacado y en la primera que llegaron nos convirtieron. La copa siempre es difícil y creo que los dos jugadores de ellos están bien expulsados. El árbitro tuvo una labor muy buena y cobrara con amonestaciones los foules para que no se le vaya el partido de las manos, después de las dos expulsiones?, comentó Seba.

 

-¿Lo esperaban así el encuentro?

-Lógicamente que luego de las expulsiones las cosas cambian. No es lo mismo jugar contra nueve que contra once; pero así y todo en el debut había que ganar para ir tranquilos a Venezuela.

 

-¿Qué fue lo mejor de Vélez para ganar el partido?

-No desesperarse, a pesar de que en el primer tiempo fuimos a buscar la pelota con bastante violencia y nos dejamos llevar lo que es jugar una copa. Tuvimos muchos amonestados y eso lo tenemos que mejorar. Lo que hicimos bien en el segundo tiempo fue no desesperarnos porque ellos no salían. Imagino que ellos no querían recibir más goles porque en la general clasifican sólo los  seis mejores segundos. El dos a cero resolvió el partido y por eso no nos desesperamos.

 

-¿Sólo les faltó corregir la puntería?

-No, lo que nos faltó corregir es tener tantos amonestados, porque llegamos al vestuario con una gran cantidad.

 

-Hoy quedó demostrado lo que significa para la gente jugar la Copa Libertadores, por la ansiedad, por el recibimiento, por el marco?

-Sí, la verdad que por eso tenemos que estar mucho más tranquilos dentro de la cancha y no dejarnos llevar por el impulso de la gente, que es importante, pero hoy nos fuimos al vestuario en el entretiempo con siete amonestados y es muy peligroso porque ante cualquier jugada que llegás tarde te podés quedar con hombres de menos y emparejás el partido.

 

Carlos Alberto Martino.