El tiempo lo devolvió a sus raíces. El momento, aunque vaya a saber uno cuándo es el momento, fue éste. Después de ir y venir en su etapa como jugador sin poder cumplir el sueño anhelado de vestirse de Vélez una vez más; hoy el fútbol le hace un guiño para vestir esos colores pero como colaborador directo de Gareca.

 

José Oscar Flores, el Turu de siempre, dialogó en exclusiva con el Sitio Oficial sobre las sensaciones de volver a trabajar en club, los sueños que alimenta desde la pretemporada de Necochea y la amistad que lo une con el hombre con quien compartió sus primeros pasos en primera.

 

?Para mi es una felicidad enorme, estoy viviendo un momento muy lindo. Al ponerse la ropa del club ya uno se siente bien. Esta experiencia que arranca ahora para mi es lo mejor que me puede pasar, porque uno lo siente, porque lo quise desde chico; estar en un campo de fútbol en este club donde hice todas las inferiores y donde me pasaron cosas muy buenas. Es muy gratificante?, comenzó Flores.

 

Cuántas veces habrá soñado con este momento, quizás con los cortos puestos y no con la ropa de concentración; pero qué importa, el momento de volver al primer amor llegó, sin importar la categoría de su sueño. Simplemente estar adentro. ?Esperaba un momento así. En un momento esperaba ponerme la camiseta como jugador, jugar diez minutos, un partido; y después retirarme o seguir según como estaba. Los momentos pasan y ya pasó lo de jugador. Ahora me toca estar en el cuerpo técnico, de estar del otro lado del jugador; aunque uno siempre en el fondo se siente futbolista. No sé si lo esperé, pero siempre estuvo en mi cabeza estar en el club?, remarcó el Turu.

 

-Hablás de los momentos, ¿creés que es el momento justo para trabajar en Vélez?

-No creo mucho en eso de los momentos en que tiene que tocar, o te pasa una vez en la vida, o subite que el tren no vuelve a pasar. Yo creo que si no era en este momento iba a ser más adelante. Siento y pienso que es así. Estoy feliz hoy que me toca estar trabajando con la gente del club, con el Flaco Gareca, con todos sus ayudantes. Disfruto de este momento, si tendría que haber sido más adelante, nunca se sabe.

 

Con este ir y venir de momentos que propone la charla, es casi inevitable pasearse por la memoria y refugiarse en las imágenes de un José Flores con varios años menos, iniciándose en el fútbol con su ilusión a cuestas. Allí en ese mismo recuerdo, aparece un hombre merodeando el instante final de su carrera, coincidiendo con él en un mismo grupo humano. Principio de lazo que el tiempo con el fútbol como excusa supo reforzar hasta la actualidad. Ese hombre era ni más ni menos que Ricardo Gareca, el hoy entrenador de Vélez y con quien comparte el Cuerpo Técnico. ?No solamente que nos conocimos cuando yo estaba subiendo con dos o tres muchachos y él estaba en el final de su carrera; sino que nos ayudó mucho a todos los chicos. Era una persona que te protegía al más chico que subía de las inferiores y por eso es el cariño especial que le tenemos y que fuimos manteniendo a pesar de los años. Cada uno hizo su vida futbolística, pero siempre en alguna oportunidad nos juntábamos y hablábamos. El cariño especial del que te hablo nunca se perdió. Hoy nos reencontramos en un lugar que todos queremos?, se emocionó José.

 

Quizás esa faceta de jugador de la cual aún no ha podido despegarse, es la que lo lleva a vivir de una manera distinta y especial ésta que le toca vivir desempeñándose como Ayudante de Campo. No es casualidad verlo meterse en los circuitos de potencia, o correr los tres kilómetros que separan al balneario del hotel por las doradas arenas necochenses en compañía del Bocha Santín. ?Uno está de este lado pero interiormente nunca se saca los botines, sigue siendo futbolista. Encontramos un plantel bárbaro, los chicos son espectaculares, laburan un montón con buena onda. Me siento muy identificado con todos ellos y cuando puedo me gusta estar. Me siento todavía futbolista?, confesó el ex Deportivo La Coruña.

 

-Además a este grupo más de una vez dijiste que lo conocías bien?

-Sí, los conozco a todos porque los fui a ver durante todos los últimos dos años, entrené mucho con las inferiores también así que conozco mucho a la mayoría.

 

Además agregó características en su comentario a su personalidad en el manejo del grupo. ?Me gusta acompañarlos y alentarlos. Uno que fue jugador le gustaba que lo alienten, que sean positivos, levantarte con buena onda y darle para adelante, más allá que la pretemporadas son durísimas; yo como jugador las sufría mucho y no me gustaban. Entonces, en lo que pueda ayudarlos para seguir adelante lo voy a seguir haciendo?, finalizó José Oscar flores.

 

Carlos Alberto Martino.