Lejos de encontrar un mínimo detalle librado al azar, el plantel de fútbol profesional encara sus últimos días de preparación con la más destacada contracción al trabajo. Y como el tiempo es un recurso no renovable, a las 8.30 de la mañana ya estaban los cuatros arqueros bajo a las órdenes de Jorge Bartero para dar inicio a los ejercicios que el puesto de guarda meta demanda.  Fueron necesarios 30 exigentes minutos para observar revolcarse por el piso a Germán Montoya, Marcelo Barovero, Ezequiel Cacace y Alan Aguerre. El resto de sus compañeros, salieron a la cancha auxiliar número 1 de la Villa Olímpica a las 9. 00 hs y el cuerpo técnico planificó un interesante trabajo: Cuatro equipos, con ochos jugadores cada uno, dónde un grupo atacaba y otro defendía, intentaban tomar control de los envíos aéreos que soltaban los piés de Nicolás Cabrera, Leandro Velázquez, Emiliano Papa, Pablo Lima y Maximiliano Moralez. Resultó interesante apreciar como en cada jugada, los que tenían la misión de defender, al despejar la pelota, nuevamente volvía a escena mientras el esférico volvía a a ser lanzado por los anteriormente nombrados y así las jugadas cobraban un vertiginoso ritmo. Cuando se marcaban tres goles, salían los dos grupos, e ingresaban los otros dos que aguardaban afuera. Y así sucesivamente, intercambiando puestos y posiciones.

 

Luego, hubo tiempo para que los dirigidos por Ricardo Gareca realizaran trabajos de definición. Donde, individualmente, controlaban los centros y comenzaban su carrera hacia al arco para culminar con la tarea. José turu Flores y Sergio Santín, en otro ejercicio, recibían el pase del grupo de volantes y delanteros, devolvían la pared, y estos últimos practicaban sus trabajos de definición frente a los arqueros. Mientras que por su parte, los defensores, tras el envío de largos pelotazos, debían controlar la pelota, resolver en dos jugadas y despejar o parar el esférico y pasarlo a un compañero.

 

A horas del ansiado arranque por los puntos, es bueno saber que los jugadores lesionados, van evolucionando de sus molestias. Tanto Rodrigo López como Jontahan Cristaldo, que no viajó con sus compañeros del Seleccionado Nacional, trotaron intensamente 30 minutos bajos la supervisión del Profe Ernesto Colman. El ya-ya es optimista para estar contra Colón, pero hay que seguir aguardando por el estado de su tobillo izquierdo. Mientras que para ver al churry, habrá que esperar un tiempo, dado que estría descartado para el inicio frente a los sabaleros, esperando por su presencia durante el transcurrir de las jornadas.

Los jugadores quedaron libres, y mañana se reintegrarán a partir de las 9 hs para seguir con las tareas de entrenamiento en la Villa Olímpica.

 

 

Diego Guitian