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La Olímpica Valeria

A sus 23 años volvió al lugar donde supo ser feliz: la Gimnasia Artística y Vélez la recibieron con los brazos abiertos. Mientras está a las puertas de competir otra vez con la Selección Argentina, Valeria Pereyra se sumerge en su apasionante historia y la comparte.

Por Diego Guitian

Una vida dedicada al deporte, puede tener momentos de desasosiego, falta de interés o cansancio. Le pasa a cualquiera y también a los que emprenden su búsqueda en la alta competencia. La Gimnasia Artística es una disciplina de extrema preparación y rigurosidad, incluso dentro de la rama amateur.

En ese camino, Valeria Pereyra (Buenos Aires, 12 de febrero de 1996) experimentó todas las sensaciones posibles dentro del deporte que ama: Fue Campeona Metropolitana, Nacional, Sudamericana, Infantil, Juvenil y Mayor, obtuvo una medalla de bronce en la Copa del Mundo en Maribor (Eslovenia) en 2012 y el mismo año formó parte de un Juego Olímpico hasta que su cuerpo, pero también su cabeza, le dijeron "basta".

Tres años afuera de las vigas, las barras asimétricas, el suelo y los saltos, le alcanzaron para que los mismos componentes de su anatomía, le indicaran el camino de vuelta. Y aquella frase que alguna vez le dijo su entrenadora (y mentora) Daniela Conde, "el límite es el cielo", nuevamente cobró sentido.

"Volví en octubre pasado a entrenarme. Y la verdad que estoy súper bien, nunca dudé que fuera en Vélez, mi casa. En el mes de abril retorné a competir oficialmente con la Institución y días después quedé en el equipo nacional para encarar el Sudamericano de Gimnasia y los Juegos Panamericanos de Lima. Es realmente increíble lo que estoy volviendo a vivir", relata con sumo entusiasmo Valeria a horas de emprender vuelo a Santiago de Chile para competir en el Campeonato Sudamericano de Adultos de Gimnasia Artística.

Antes de volver a sentir la adrenalina típica en la previa de un torneo, Pereyra experimentó momentos muy distintos a los de ahora. Desde los 3 años comenzó a formarse en el deporte y de a poco forjó su ingreso a la Gimnasia de elite. Su pico de rendimiento fue en los Juegos Olímpicos de Londres con tan solo 16 abriles cumplidos, cuando la Argentina volvió a tener una representante de la disciplina luego de la ausencia en Beijing 2008. El año posterior a un JJOO siempre es complejo por todo el desgaste que acarrea la gran cita y cuando alistaba sus energías para Río 2016, se rompió el ligamento cruzado de una de sus rodillas. Punto de quiebre en la vida de Valeria.

Entre 2015 y 2018 se enfocó en sus estudios (cursa el tercer año de la Licenciatura en Comunicación Audiovisual en la Universidad de Palermo) y en el trabajo, abocada al área del Marketing. También escribió un libro (Vale, un sueño olímpico) y dio charlas en el interior del país en distintas escuelas de Gimnasia. Sin embargo, a sus 22 años, decidió retornar a Vélez. Porque como dice el tango, siempre se vuelve al primer amor.

"Psicológicamente post Londres fue muy duro volver a planificar todo. Hoy me encuentro en otro lugar y eso es lo importante. Elijo el proceso, los torneos, organizo mis entrenamientos. Estoy muy presente en el día a día junto a Daniela Conde y Antonella Blanco, que siempre están junto a mi y no tengo más que palabras de agradecimiento con ellas y con todo Vélez", remarca. Y claro, en su ausencia -pero siendo ella el leitmotiv de su creación- se edificó el Gimnasio de Gimnasia Artística en el Polideportivo. Pereyra señala al respecto: "Es una gran ayuda, no existe otro espacio así como el que tenemos. Es un lugar propio, exclusivo, muy bien equipado y nadie más lo tiene a nivel Clubes. Sin dudas que con el nuevo gimnasio, las ganas de volver se acentuaron".

-¿Qué objetivos te planteás en esta nueva etapa deportiva de tu vida?

-En mi vuelta el objetivo principal era meterme nuevamente en el equipo nacional y prepararme para los Juegos Panamericanos de Lima. Después está el Mundial de Gimnasia Artística, en Octubre, que se va a disputar en Alemania y que será clasificatorio  para Tokio 2020. Veremos como llego a cumplir las metas, pero bueno, voy de a poco.

-¿De qué manera volvés mentalmente a Londres 2012?

-Me hubiera gustado vivirlo de más grande, más madura. Pero lo recuerdo muy bien, como un acontecimiento único que disfruté un montón y tener la experiencia me sirvió mucho porque pesa bastante eso en la gimnasia. 

Orgullosa de representar a Vélez "el club que siempre nos dio todo y nos sigue apoyando", este martes viaja Chile con el equipo argentino para disputar el Sudamericano junto a otra representante del Fortín, Agustina Pisos. Volvió al Club y también al Cenard. Su vida transita caminos ya recorridos con éxitos y medallas. En su andar, la Olímpica Valeria, ya sabe que el límite es el cielo. Y otra vez se propuso tocarlo nuevamente con las manos.