Fútbol Amateur

“Es muy difícil irse de Vélez, por eso decidí quedarme”

Confirmado para dirigir la Quinta en 2016, Marcelo Gómez ensayó el balance de un 2015 difícil en cuanto a resultados al frente de la Séptima pero ''muy positivo para mi porque aprendí bastante de los chicos''. El Negro habla de lo que viene, sus objetivos y el idilio con el club de sus amores.

''Fue un proceso complicado este año. Se hizo difícil mirar la tabla y mantener una forma de jugar. Pero entendí que debía cambiar, escuchar al Coordinador y Directivos para que los chicos mejoren'', asegura el ex Campeón del Mundo que ya planea un gran año con la Quinta División.

Confirmado para dirigir la Quinta en 2016, Marcelo Gómez ensayó el balance de un 2015 difícil en cuanto a resultados al frente de la Séptima pero ''muy positivo para mi porque aprendí bastante de los chicos''. El Negro habla de lo que viene, sus objetivos y el idilio con el club de sus amores.

-Si bien el período vacacional te limita, imagino que estás planeando en tu cabeza cómo jugarán tus nuevos dirigidos...

-Ya empecé a trabajar y ver con qué material cuento, porque a los chicos no los conozco, nunca compartimos ni turno de entrenamiento o días de partidos entonces será una experiencia nueva. Tengo una muy buena referencia de la Categoría 1998, sobre todo de las personas que trabajaron con ella; me hablaron muy bien como un grupo humano bastante unido y después, por otro lado, la capacidad técnica de los chicos es muy buena. Empiezo a imaginar un año positivo y lleno de optimismo, planificando lo que puede ser una temporada importante para ellos.

-Desde hace unos años se dice que la Quinta es la División filtro dentro del Fútbol Amateur, incluso más que la Cuarta, ¿coincidís?

-Sí, porque empiezan a definir su futuro y profesión. Los últimos años se dio eso: los proyectos con mayores posibilidades aparecen en Quinta. Siempre fue la División a la que hay que prestarle mayor atención, por eso estoy muy feliz de volver a dirigir en esta etapa. Entiendo que puedo serles útiles en este momento de su formación.

-Este año te tocó estar al frente de una Séptima (Categoría 1999) la cual no tuvo un buen rendimiento y fue la División que más abajo terminó en la tabla respecto a las otras cinco. ¿Pudiste sacar cosas positivas pese a esto?

-Sin dudas, se los dije al terminar el año a los chicos. Si bien no sé dieron los resultados deportivos, para mí fue el año más importante, donde más pude aprender. Me tocó un grupo humano muy bueno, predispuestos y ante la mala, estaba obligado a bucear para encontrar soluciones y trabajar mucho más. Generalmente no hay que tocar demasiado pero fue un año útil para mí y siento que me servirá a futuro.

-¿Cómo se vivió en Inferiores, y en tu equipo en particular, el año de la Primera? Dio la sensación que todo repercutió abajo.

-Fue un proceso complicado a medida que se iban dando los resultados, se hizo difícil mirar la tabla de posiciones. También se hizo difícil mantener una forma de juego y entendí que debíamos cambiar, por eso escuché a las personas que consideraban necesario ese cambio y les di lugar, ya sea al Coordinador Marcelo Romano o mismo Directivos que tenía una opinión parecida. Los cambios fueron para bien y los chicos se sintieron más cómodos y seguros, aparecieron los resultados pero creo que se debió a la mejora del grupo. No fue fácil este año, ni para ellos que venían de ser protagonistas en Divisiones anteriores ni para mí tampoco, pero también me sirvió para crecer buscando modificaciones y variantes en mi propuesta.

-¿Cuán distinto es el Fútbol Juvenil de hoy a lo que era en tus años de jugador?

Entiendo que es complicado hoy el mundo de los chicos. Complicado mantenerlos enfocados porque tienen muchas tentaciones que hacen que se dispersen, mismo ni ellos tienen claro si quieren seguir este camino. Siendo más jóvenes sufren la inmadurez típica de la edad pero creo que sacamos muchas cosas positivas para su futuro.

-Paralelamente, con la llegada de Bassedas al primer equipo, también se modificó la estructura del Fútbol Amateur y arribó Alberto Fanesi como nuevo Coordinador, alguien que conocés muy bien cuando vos eras Juvenil ya que te dirigió allá por el año 1987.

-Fue un reencuentro muy emotivo porque Alberto fue el primer Entrenador que me dio la posibilidad de jugar y confió mucho en mí, pensó que podía jugar en Primera aún cuando yo no lo pensaba. Siempre lo tuve presente y esta posibilidad de volver a cruzarnos fue motivo de alegría. Hablamos de fútbol, coincidimos en muchas cosas y me propuso volver más arriba a la hora de dirigir las Divisiones grandes y lo acepté, porque siempre quise retornar al turno mañana. Estoy muy contento y agradecido, feliz por ser reconocido y tener un lugar importante en esta familia que es Vélez.

-¿Tuviste propuestas para dejar el club?

-Sinceramente hubieron posibilidades pero volví a atravesar sensaciones similares a cuando fui jugador. En aquella época me costó tanto irme de Vélez y después en algún punto me arrepentí de haber ido; y ahora viví algo parecido, viendo qué perdía y qué ganaba. Va a ser muy difícil encontrar en otro lado el cariño para conmigo y mi familia que recibo acá en. Evaluando todo eso, llegué a la conclusión que lo mejor fue continuar donde estoy y así seguir formándome para el día de mañana que es dirigir un Plantel Profesional. Nunca lo escondí, es mi ambición y mi deseo, pero también he hablado con Fanesi y nos pusimos de acuerdo en que uno debe entender qué lugar ocupa y dónde estoy, por eso pondré lo mejor para el beneficio de los chicos de la Quinta.